Cuando exista un retraso o dificultades en la adquisición de habilidades, destrezas o conductas apropiadas a cada edad, como: el habla, control de esfínteres, diferentes hábitos de autonomía, lectura y escritura, relaciones sociales…
Cuando persisten y se mantienen en el tiempo características de edades anteriores: miedos a dormir, solo, a la oscuridad, a los extraños a no separarse de la familia …
En ocasiones los niños muestran su malestar y desadaptación a través de su comportamiento (estar enfadado, llorar, cambios bruscos de humor, desobedecer, negativismo u otras conductas perturbadoras ) o por las cosas que dicen o cómo las dicen … Pero en otras , las manifestaciones pueden ser más sutiles tanto que no se las considera problemáticas, como estar muy tranquilos, apagados, sin ganas de jugar, no molestan, ser siempre muy solícitos …
En cualquier caso siempre que la familia y/o el colegio tengan dudas sobre la adecuación o no de ciertos comportamientos, o el manejo de ellos, sería conveniente acudir. La prevención es muy importante.
¿CUALES SON LOS PASOS A SEGUIR?
Realizar una primera consulta para determinar si las dificultades de su hija aconsejan o no la intervención terapéutica y que tipo de intervención sería lo primero.
Para ello:
Buscar un buen equipo de profesionales, con prestigio y años de experiencia, con reconocimiento oficial y colegial, con garantía.
Pero no se sienta cohibido y solicite toda la información que necesite y plantee todas sus dudas hasta quedar satisfecho de que acude a un centro y le atiende un psicólogo que le merece la mayor de su confianza.
¿COMO SE REALIZA LA EVALUACION?
La familia y el colegio son la primera y más importante fuente de información para la evaluación de las dificultades comportamentales y los trastornos de los niños.
En una primera fase se realiza una descripción del problema:
Qué ocurre, cuáll es su comportamiento, desde cuando ocurre, cuánto perturba el problema la vida normal del niño, a su desarrollo, a su rendimiento académico …
Cuánto y de que manera perturba el problema a la vida familiar y en el ámbito escolar.
Cómo lo manejan los padres y los profesores.
Y otros datos importantes sobre acontecimientos vitales: estado de salud, accidentes , cambios en la vida del niño, nacimiento y/o muerte de familiares, cambios de colegio, enfermedades de alguno de los padres, clima familiar …
¿QUE HERRAMIENTAS Y PROCEDIMIENTOS SE USAN PARA LA REALIZACIÓN DE LA EVALUACION Y DEL DIAGNOSTICO?
Mediante, entrevistas, cuestionarios, pruebas estandarizadas y Test psicométricos.Con niños se utilizan otros procedimientos como la observación conductual, los registros u observaciones conductuales en el medio natural.
En ocasiones para completar el diagnostico es necesario un trabajo en equipo con otros profesionales : psiquiatras, neurólogos, logopedas.
¿COMO SE LLEVA A CABO LA INTERVENCIÓN?
Una vez concluida la evaluación y el diagnostico, se plantea una intervención y se da un pronostico. Se establecen unos objetivos y metas y se explica como conseguirlos y la periodicidad de las sesiones.
En ocasiones la intervención solo se lleva a cabo con los adultos ( familia y colegio) ya que cambiando ciertas actitudes, pautas educativas, tipo de relación y comunicación y/o manejando el ambiente, la conducta de los niños mejora y sus desajustes desaparece, pudiéndose desarrollar de una manera adecuada tanto comportamental como psicológica y afectiva.
En otras ocasiones los propios niños deben acudir a tratamiento para ser ellos los que adquieran herramientas, habilidades y “trucos” para resolver sus dificultades.
¿COMO SE PUEDE VALORAR LA INTERVENCIÓN?
La intervención es un proceso, hay que saber darle tiempo que se merece y no es el mismo para cada caso. Pero ello no significa que no podamos estar informados del punto en el que nos encontramos.
Ha de existir una información clara a los padres de los avances, de los obstáculos a superar, del momento en el que puedan plantearse, del trabajo realizado en las sesiones con el niño, de las técnicas empleadas, etc …
Esta comunicación ha de ser continuada y transparente y de ella dependerá tanto del buen hacer profesional como de la actitud de los padres.
Todo ello servirá para valorar la calidad y continuidad de la intervención que se está recibiendo
En otras ocasiones los propios niños deben acudir a tratamiento para ser ellos los que adquieran herramientas, habilidades y “trucos” para resolver sus dificultades.
¿QUE SE LE DICE AL NIÑO SOBRE LA TERAPIA?
No mentirle y darle toda la información de manera adecuada y ajustada a su edad y al conocimiento que tenga el niño del problema.
Qué es un psicólogo, un especialista, un entrenador, un técnico, un profesional que le va a ayudar a resolver sus dificultades.
“ Que sabe escuchar, entenderte, que te va a apoyar, en el que puedes confiar, que sabe por qué ocurren ciertas cosas y sobre todo que sabe cómo puedes resolverlas, que te va a enseñar “trucos”, te va a dar estrategias, para conseguirlo …, al que acudirás un día a la semana durante un tiempo, que a veces solo estaréis vosotros dos, pero en otras podréis trabajar con otros niños … que cuando resuelvas tus problemas, dejarás de ir porque ya no lo necesitarás … pero que si alguna vez lo necesitas podrás volver y seguro que se acordará de ti … “.
Además, para padres con hijos adolescentes o preadolescentes: ¿Cómo conseguir que mi hijo adolescente acuda a consulta?